29 de octubre de 2007

Discrepancias económicas de la Biblia

En un parábola del Nuevo Testamento (Mateo 25:14-29) se habla de un hombre que antes de salir de viaje llama a tres miembros de su servidumbre y a cada uno le entrega varias monedas. Al primero le da cinco monedas (conocidas como talentos), al segundo le entrega dos y, al tercero, una.

Lo más seguro es que el resto de la historia ya lo conozcan. El siervo que recibió los cinco talentos los puso a trabajar y duplicó la inversión. El que recibió dos hizo lo mismo y también duplicó la entrega inicial. Por último, el siervo que recibió un talento enterró la moneda.

Después de mucho tiempo, el viajero regresó y llamó a sus siervos para que rindieran cuentas. Cuando el siervo que recibió cinco talentos le entregó diez, el amo reconoció su trabajo diciendo "siervo bueno y fiel". Igual al que recibió dos monedas. Este le entregó cuatro a su jefe y su esfuerzo también fue reconocido. El que recibió una moneda perdió la confianza del amo quien, además, se la quitó.

La historia no termina ahí.

Después de quitarle la moneda, el amo le entrega ésta al siervo que tenía 10 monedas. En otras palabras, el amo hace una redistribución de los recursos que beneficia al que más tenía y no, contrario a lo que uno podría pensar, al siervo que menos poseía (de los dos productivos).

El mensaje de esta parábola, que premia la inversión, el trabajo y la generación de riqueza, parece discrepar con otro pasaje bíblico que es utilizado frecuentemente en los ambientes eclesiásticos.

En Marcos 10:17-24, después de que Jesús le explica a un hombre rico que debe hacer para llegar al cielo, sentencia que "es más fácil para un camello pasar por el ojo de una aguja que para un rico entrar al reino de Dios".

En lo personal si parece que ambos pasajes mandan mensajes distintos. Probablemente hasta contradictorios. En el primero se hace una redistribución de la riqueza hacia el que más tiene. El amo pudo haberle entregado la moneda al siervo que tenía cuatro talentos y quien también había duplicado la inversión. Pero no lo hizo así. Aquí se premió al que más tenía y en el segundo texto se le genera un sentimiento de culpa y se le anuncia un castigo (no entrar al cielo).

Me interesa conocer su opinión.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Con todo respeto, creo que la contradiccion esta solo en ti...y claro, en la de miles y millones de personas, que han tomado ese verso y lo han convertido en algo que no es. Lo que dice Jesus es que aquellos que son glotones no pueden encontrar el Reino; aquellos que son "greedy" y quieren mas y mas solo por el simple hecho de tener mas y mas. Si lees con el contexto, veras que a eso se refiere. Pero toda la Biblia, todita, demuestra que el tener suficiente dinero y el ser rico es algo espiritual, y es algo muy bueno.

Claro, la gente ve lo que quiere ver, y el verso que mencionaste es buena escusa para aquellos que no quieren producir y contribuir a la sociedad: decir que Jesus dijo aquello y esto. Yo diria que el no tener dinero es el verdadero pecado aqui, porque los que no tienen dinero hacen cosas espiritualmente bajas. El hombre fue disenado para ser rico, y el punto que hace Jesus es que tambien es necesario ser humilde.

Anónimo dijo...

claro que puede haber contradicción. estos textos fueron escritos por personas distintas en épocas distintas y modificados durante varios siglos. pretender que la biblia tiene un mensaje uniforme es cerrar los ojos y esconder la inteligencia en la tierra (como uno de los personajes del texto)

Anónimo dijo...

los pasajes biblicos especialmente las parabolas son mensajes que buscan dar una enseñanza principalmente espiritual, pero aun escuchando solo la parte "practica", a mi me parece que no hay una contradicción, el tema de hacer crecer los bienes es intrinsecamente bueno, en cuanto que hay una consideracion del destino universal de los bienes que es que todos tengan una parte que les ayude a satisfacer sus necesidades.Por otro lado el tema de la riqueza que estorba es aquella que no respeta esto ultimo mencionado y se acumulan con avaricia, solo por el placer de acumular bienes que finalmente ya no "sirven" y por el contrario llevan a un estado de egoismo tal que es lo que le impedira al rico entrar obtener la salvación.

Anónimo dijo...

Gracias a todos, ha sido muy interesante leerlos. El cristiano monetarista anónimo "la gente ve lo que quiere ver" ( y no es eso precisamente lo que tu haces al construir tu argumento? ). Por cierto que yo recuerde Gandhi no tenía un clavo, y ello no le llevó a hacer cosas "espiritualmente bajas" ummm, tampoco Jesucristo o sí?. Otra: "el hombre fue diseñado para ser rico" (um, buenísima, en talentos, o en dólares?)

Mi estimado anónimo dos tiene razón en algo, muchas plumas escribieron la Biblia, ya hubo una serie de Concilios precisamente tratando de darle uniformidad ( por ello lo encontrado en Qum Ram no aparece aún en la nueva edición de la Latinoamericana, pero mas alla de eso, incluso el antiguo y el nuevo testamento tiene, por decirlo así ( y sin buscar herir ninguna susceptibilidad ) "varios Dioses", cuando menos dos, el guerrero, justiciero que "siembra donde no cosecha" del antiguo testamento y el conciliador que perdona todo con el arrepentimiento del nuevo. El ojo por ojo contra dar la otra mejilla?

Finalmente Ruth nos da una luz mas sensata, lima inteligentemente la aparente diferencia, pero sin embargo subsiste. Recuerdas aquel argumento (creo froidiano) de como el Sentimiento de Culpa personal en algunas naciones genera subdesarrollo? (renunciar a la satisfacción pulsional dirían). El Nuevo testamento lo aclara: en "un solo nuevo mandamiento", el antiguo, tiene 10. Por ahi hay un estido del pensamiento sociológico del judío ( quien se quedó solo con el "viejo" testamento )realmente reacciona igual a las transacciones de mercado que el católico educado bajo la colonia española-portuguesa-italiana? Es pregunta.

Anónimo dijo...

....Y despues llegan a gerentes o capitanes y cualquier tonteria en que se equivocan, les endilgan los errores a otros...

bah¡¡¡...