6 de agosto de 2007

Petróleo y finanzas públicas

Enrique Quintana titula su columna de hoy SE GESTA OTRA CRISIS PARA EL 2012. Aquí está el link a su artículo (que aparece en la sección Negocios del Periódico Reforma). En términos generales, en su artículo analiza algunas posibles implicaciones de que la producción petrolera en nuestro país continúe disminuyendo y el poder legislativo no reforme el marco constitucional y legal para permitir la coinversión de capitales públicos y privados en este sector.

Estoy de acuerdo con Quintana de que la falta de inversión afectará irremediablemente las finanzas públicas. No obstante, no puedo dejar de pensar si en realidad al país no le convendría, en un futuro, que el gobierno no dependiera del petróleo. Muchos estudiosos han hablado de la "maldición del petróleo" (en inglés, 'curse of oil'). En las últimas décadas hemos visto como los países con reservas importantes de petróleo se han caracterizado por tener, en su gran mayoría, regímenes autoritarios y/o economías disfuncionales (Noruega es una de las pocas excepciones). Aquí hay un documental de la BBC sobre el tema.

Por último, Quintana termina su artículo diciendo:

"Esperemos que la sensatez le gane a las mitologías y que en esta misma legislatura podamos ver una reforma constitucional que permita ... que Pemex pueda coinvertir con el capital privado..."

Yo preferiría que en esta legislatura veamos reformas que permitan a los gobiernos (independientemente del partido) ya no depender del petróleo para mantener las finanzas públicas. Eso sería más sano.

3 comentarios:

JUAN CARLOS LUNA dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
JUAN CARLOS LUNA dijo...

No estoy seguro, al menos que consideres lo contrario Dr. Boy, que la reforma energética, o aún mas: la participación de capital privado en PEMEX, reduzca en el corto plazo la dependencia mexicana del efecto "petrolizador" de la economía que bien sabemos es uno de los tres grandes ingresos nacionales ( junto a remesas y turismo)y ´que ha sido el calvario de los vaivenes económicos del pasado, y un poco del presente.

En lo que quiero hacer el matiz es que el cambio de regimen para Petroleos Mexicanos NO nos modifica "instantaneamente" la petrolización de la economía: (si sanaría las finanzas públicas de la paraestatal, pero no genera una reducción directa e inmediata de la dependencia mexicana de dicho factor).

Concluyo que la reforma es necesaria, pero no es la panacea del problema de petrolización de la economía mexicana.

Anónimo dijo...

Pepe yo creo que es importante que cuando se hable de PEMEX y de las Finanzas Públicas, se manejen los temas por separado, porque la dependencia del los 3 órdenes de gobierno de recursos provenientes de PEMEX es una problemática muy independiente de las opciones de inversión en PEMEX. Si bien es cierto que en algún punto se van a cruzar, ambas merecen atención separada y soluciones independientes, de lo contrario acabaremos con conclusiones (como la del artículo) que, desde mi punto de vista, pueden no ser correctas.