En los últimos meses, los precios de algunos alimentos han aumentado de manera importante (mas información de esto, ver aquí). Este hecho, en principio, beneficia a los productores quienes reciben mayores ingresos por su trabajo y los bienes que comercializan. ¿De que depende que esto suceda? En gran medida, del tipo de política pública que adopta un gobierno.
El New York Times publica hoy un interesante artículo que contrasta actitudes y reacciones de los gobiernos de Brasil y de Argentina en vista del aumento de precios de granos básicos y otros alimentos a nivel internacional. Ambos países sudamericanos son dos de los productores más grandes del mundo.
Aquí la nota.
En resumen, el gobierno brasileño ha implementado políticas que se adaptan a la situación (el aumento de precios) y que permiten a los agricultores aprovechar la 'bonanza' internacional. Entre estas medidas encontramos créditos para renovar maquinaria y, de esta manera, aumentar la producción y exportación.
En Argentina, la reacción es totalmente distinta. Ahí el gobierno desincentiva la exportación y cobra impuestos a los exportadores. ¿Por qué hace eso? Según ellos, los alimentos deben quedarse en el país y, de esta manera, se reducen los niveles inflacionarios.
Aquí un artículo (de The Economist) sobre Argentina y las nubes económicas en su horizonte.
PD. Cambiando de tema, no todos los alimentos han subido de precio. Las langostas de Maine, por ejemplo, han experimentado una reducción considerable en las últimas semanas. Aquí la fuente.
...
No hay comentarios:
Publicar un comentario